La industria del acero en el mundo busca que para el año 2050 sean cero emisiones netas y estén descarbonizados al 100%. Son muchas las tecnologías y acuerdos que buscan este objetivo. Desde el uso de hidrógeno y carbón vegetal obtenido de plantaciones con certificado FSC®, hasta la transferencia de tecnología entre las diferentes empresas y países que controlan la mayoría del mercado del acero a nivel mundial.
A continuación, responderemos el por qué de esta transición, cómo se piensa o se está llevando a cabo y para qué hacerlo.
¿Por qué?
Desde ya varios años es bien sabido que el cambio climático es real y ha sido objeto de miles de artículos, noticias y debates. Entre tantos, el acuerdo de parís del año 2015; el cual firmaron 195 países, tiene como objetivo limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales. Para lograr este objetivo, los países se comprometen a varias metas, entre las más importantes se encuentra Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, meta de la que la industria de fabricación de acero está muy comprometida.
La industria siderúrgica es uno de los mayores emisores de gases efecto invernadero en el mundo. Si fuese un país, sería el tercer emisor de CO2 y el segundo en consumo de carbón. De hecho, la industria en su conjunto fue responsable del 29,4% de todos los gases de efecto invernadero emitidos en 2016 (incluido el uso de energía).
Ahora bien, para entender la magnitud de estas emisiones es necesario saber qué es el acero. Este es una aleación (combinación de metales) del cual se pueden lograr varios tipos de acero. Para lograr su fabricación es necesario que se lleguen a temperaturas de rondan los 1400 °C. Para poder llagar a esta, se hace uso de combustibles fósiles, específicamente, el carbón. Convirtiéndose en la fuente principal de emisiones de gases efecto invernadero de esta industria. Ya que, por cada tonelada de acero producida se emiten alrededor de 1,8 toneladas de CO2. Produciéndose en el año 2019, 1880 millones de toneladas de acero.
Estos datos nos ofrecen una perspectiva general a cerca de la influencia de esta industria en el cambio climático, del cual no es la única responsable, pero ese es un tema para otro artículo.
¿Cómo?
Son diversas las formas en las que se plantea enfrentar este problema, la mayoría están centradas en la tecnología que se implementa en el mayor centro de emisiones de esta industria: la producción o fabricación del acero. En seguida se nombrarán algunas.
1. Horno de arco eléctrico (EAF, por sus siglas en inglés):
Esta es una tecnología que ya está ampliamente probada e implementada, ya que producen el 25% de todo el acero. Aquí se usa el acero reciclado como material inicial. En comparación con los hornos convencionales, llamados altos hornos, son más pequeños y usan electricidad para fundir el mineral de hierro. Por lo tanto, producen menos CO2. Además, el costo de funcionamiento es menor que el de los altos hornos. Aunque al final, las emisiones se pueden equiparar al saber que la electricidad que se usa se produce a partir de combustibles fósiles.
2. Reciclaje en la industria del acero
Para empezar, es de destacar que el acero es 100% reciclable en ese sentido, el uso de chatarra contribuye a la reducción de emisiones. La energía requerida se reduce en 56% en comparación con la producción de acero nuevo. Sin embargo, para que se cumpla el acuerdo de París, el uso de chatarra se debe subir hasta el 40%, contrario al 20% que se uso para el 2018.
3. Electrólisis:
Científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) están trabajando en el proceso conocido como electrólisis de óxido fundido (MOE) el cual permite la producción de acero totalmente libre de carbono. Aunque este proceso tiene dificultades técnicas y de altos costos.
4. Hidrógeno:
La tecnología HYBRIT (Hydrogen Breakthrough Ironmaking Technology), puesta a prueba en Suecia por el fabricante de acero SSAB, la minera estatal de hierro LKAB y la empresa energética estatal Vattenfall, para fabricar acero con hidrógeno ecológico y electricidad libre de combustibles fósiles utilizando el mineral de hierro de alta calidad de las minas de LKAB en lugar de carbones de coque (carbono no fundente que se fabrica mediante la destilación destructiva de varias mezclas de carbón bituminoso).
5. Carbón vegetal:
El combustible obtenido de plantaciones con certificados FSC® como sustituto renovable del coque a base de carbón para reducir drásticamente el CO2 y erradicar el uso de carbón extractivo.
No solo la generación de nuevas tecnologías de producción por parte de las principales empresas y países es necesaria para enfrentar las emisiones y encaminar la descarbonización de la industria. Compartir esta tecnología con países en desarrollo y nuevas empresas también puede contribuir. Además, no solo centrarse en el eslabón de producción, es necesario combatir las emisiones en toda la cadena de la producción de acero. Esto involucra tanto a los compradores, principales potencias, así como los países de los cuales se obtiene la materia prima.
¿Para qué?
Esta pregunta se puede responder en una sola frase: el cuidado del planeta nos compete a todos. Con acciones tan pequeñas como el ahorro de agua en casa o caminar al trabajo, hasta las acciones como las de la industria del acero; las cuales pueden contribuir en gran medida a este propósito.
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